Se ponen a disposición del cliente recursos materiales e informáticos específicos, así como personal especializado y capacitado para activar en forma efectiva el sistema de recaudación de aportes, y demás gestiones de cobranza de los créditos que cada entidad disponga a su favor, en función de deudas provenientes de obras sociales.
La negociación se entabla en forma directa con el empleador moroso, o demás obligados que correspondieren, intimando a la cancelación de la deuda en un plazo que se establecerá atendiendo las particularidades del caso. No obstante, se buscará respetar un proceso formal y estandarizado. Así, se iniciará la gestión con respecto a las personas físicas o jurídicas que resulten de una investigación previa, teniendo especial consideración por los reportes obtenidos de la propia obra social.
Para cada deudor se determinará la deuda definitiva, según los períodos adeudados para cada empleado, y según las alícuotas vigentes al tiempo de generación del crédito y los intereses correspondientes por pago fuera de término.